lunes, 10 de octubre de 2011

...en su lugar

Ordené lo externo para ver si el interior también toma orden, a ver si todo adentro comienza a ocupar su propio lugar. Porque miro dentro y todo está revuelto, quizá si hiciese la lista de las cosas que tengo pendiente me sería más fácil poder ordenarlas y que ya no sean un lío todo revuelto. Así lo hice con el desorden que tenía entre mis cosas, estaba todo mezclado, las ropas, los materiales, cosas pendientes por hacer... puras tareas sencillas que en conjunto eran un solo tedio, pero que al nombrarlas fueron más simples de afrontar.
Siento que hay muchas cosas pero cuando intento nombrarlas son pocas, ojalá que haciendo una lista las pudiera ordenar también en una tarde eficiente... pero no, es más complejo que guardar ropa y ordenar papeles.